No hace falta irse a Japón para saber que hay muchas supersiticiones sobre las casas en las que se ha cometido un crimen o alguien se ha suicidado. Pero parece que en Japón la cosa se ha desmadrado un poco, y en muchos casos, nadie quiere alquilar esas casas encantadas. Y no solo ese apartamento en cuestión, si el crimen es muy horrible, ¡incluso los apartamentos adyacentes!
Las asociaciones de propietarios de casas van a ofrecer una especie de seguro para compensar a los que sufrán un indicente similar, si no pueden alquilar el apartamento. Y eso si no pueden sacarselo a los culpables, porque parece que hasta denuncián a los criminales por haber cometido el delito en su piso y haber devaluado su valor.
Todas estas historias me recuerdan a muchos mangas de terror, como por ejemplo Daydream. Curioso, que la gente se tome esto tan en serio. Si a mi me dejan uno de estos apartamentos más baratos, me mudo fijo. Y si el fantasma es de una chica joven, pues mejor.
De : Mainichi Daily News
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